El comercio electrónico se convirtió en una herramienta fundamental para todos los sectores industriales y empresariales. Sus prácticas se hicieron más necesarias durante la pandemia, y parece que se ha vuelto un requisito que en todos los negocios se implementen procesos para realizar compras, ventas, transacciones, entre otros, de manera digital.
Estos mecanismos se han popularizado, al punto que hay negocios que solamente funcionan a través de internet, no hay locales, y más allá de fotos o videos, no hay manera de interactuar físicamente con los productos o servicios, hasta que se adquieren.
Las cifras ratifican el crecimiento del comercio electrónico, y de acuerdo con el estudio E-commerce Report 2023, elaborado por la plataforma de pagos digitales PayU, se destaca que Latinoamérica es una de las regiones donde más se han implementado estas herramientas tecnológicas, y entre los países, Colombia es una de las más destacadas.
En la región, se calcula que entre el 2019 y 2023, se pasó de 117 millones de dólares, a USD $364 millones en transacciones, realizadas por al menos de 300 millones de compradores digitales, cifras que aumentarían un 20 % de acuerdo con lo proyectado.
Junto con Colombia, Argentina, Brasil, Chile, México y Perú son los países con mayor presencia y uso del comercio electrónico. Pero, analizando puntualmente el caso colombiano, se estima que durante el 2022, el 25 % del total de las compras en línea se realizaron hacia el extranjero, siendo China y Estados Unidos los principales países para los consumidores nacionales.
“Colombia cuenta con la tercera población más grande de la región y la cuarta audiencia en línea más numerosa. Las ventas de comercio electrónico a través de PayU han experimentado un crecimiento del 157 % en los últimos 4 años. A pesar de la desaceleración económica que atraviesa el país, esperamos mantener un crecimiento estimado del 60 % entre 2022 y 2027″, destaca el informe.
Tomado de revista Semana