Trump insiste en los beneficios de los aranceles. Por ahora debe controlar los daƱos
- comunicaciones
- hace 29 minutos
- 3 Min. de lectura
Las medidas de comercio exterior del presidente Trump no han funcionado como Ć©l esperaba y se ha visto forzado a actuar para contener los daƱos económicos y polĆticos.

En el āDĆa de la Liberaciónā proclamado por el presidente Donald Trump en abril, cuando anunció los aranceles que han trastocado el comercio mundial, prometió que ālos puestos de trabajo y las fĆ”bricas volverĆ”n con fuerza a nuestro paĆsā. La imposición de aranceles a las importaciones, prometió el presidente de Estados Unidos, āabrirĆ” los mercados extranjeros y derribarĆ” las barreras del comercio exteriorā, lo que se traducirĆa en precios mĆ”s bajos para los estadounidenses.
Hasta ahora no ha funcionado asĆ, y Trump se ha visto forzado a actuar para contener los daƱos económicos y polĆticos.
El lunes, en la Casa Blanca, el presidente anunció una ayuda de 12.000 millones de dólares para los agricultores estadounidenses, quienes se han visto perjudicados en gran medida por sus polĆticas comerciales.
Los aranceles siguen ejerciendo presión al alza sobre los precios, lo que ha puesto al gobierno de Trump a la defensiva frente a la profunda preocupación pĆŗblica por el costo de vida. El martes, el presidente irĆ” a Pensilvania para pronunciar el primero de lo que la Casa Blanca denomina una serie de discursos sobre el problema de la āasequibilidadā, que la semana pasada Trump tachó de āla mayor estafaā jamĆ”s concebida por los demócratas.
China, la segunda economĆa mĆ”s grande del mundo y principal competencia económica y tecnológica de Estados Unidos, publicó el lunes cifras que muestran que aĆŗn registra un superĆ”vit comercial rĆ©cord con el resto del mundo, aun cuando su comercio global y su superĆ”vit con Estados Unidos se reducen. Esto sugiere que PekĆn estĆ” aprendiendo rĆ”pidamente cómo prosperar, incluso en un mundo en el que Estados Unidos se convierte en un lugar mĆ”s difĆcil para hacer negocios.
Y, hasta la fecha, apenas hay indicios de un retorno generalizado a los pueblos y ciudades estadounidenses los puestos de trabajo en el sector manufacturero que se perdieron a causa de décadas de automatización y globalización.
Trump insiste en que su emblemÔtica decisión de imponer los aranceles mÔs elevados a las importaciones estadounidenses desde 1930 estÔ funcionando, o funcionarÔ pronto. Sigue culpando a su predecesor, Joe Biden, de todos los males económicos, aunque el argumento es cada vez mÔs endeble a medida que se acerca su primer aniversario en el cargo, en tan solo seis semanas.
Se encuentra mĆ”s o menos en el mismo lugar que Biden a principios de 2024: diciendo al pueblo estadounidense que les estĆ” yendo muy bien, cuando muchos no lo sienten asĆ. Ha rechazado los comentarios sobre los elevados precios de las tiendas de comestibles, e insiste en que estĆ”n bajando. Pero la inflación subió ligeramente en septiembre, hasta aproximadamente un 3 por ciento de aumento anual, casi exactamente donde estaba cuando su predecesor dejó el cargo.
Los puestos de trabajo en el sector manufacturero han seguido disminuyendo gradualmente este aƱo, con pĆ©rdidas de unos 50.000 desde enero. (Estas cifras contribuyeron a la destitución en julio del director de la Oficina de EstadĆsticas Laborales, despuĆ©s de que Trump anunciara que las revisiones a la baja de los informes oficiales de empleo estaban āmanipuladasā).
No es sorprendente que el lunes Trump intentara presentar los 12.000 millones de dólares de ayuda de emergencia a los agricultores como una victoria, otra prueba āal menos para Ć©lā de que su decisión de imponer los aranceles mĆ”s elevados a las importaciones estadounidenses desde 1930 estĆ” funcionando, o lo harĆ” pronto.
En las Ćŗltimas semanas, ha prometido utilizar los ingresos arancelarios que llegan al paĆs para extender un cheque gubernamental de 2000 dólares a cada contribuyente (āĀ”sin incluir a las personas con ingresos altos!ā, exclamó en Truth Social en noviembre). La semana pasada, declaró en una reunión del gabinete que āen algĆŗn momento de un futuro no muy lejano, ni siquiera tendrĆ”n que pagar el impuesto sobre la rentaā.
Las cifras no cuadran: Estados Unidos ha recaudado este aƱo unos 250.000 millones de dólares en ingresos arancelarios, un poco menos que los 2,66 billones de dólares en impuestos federales sobre la renta de las personas fĆsicas en el ejercicio fiscal 2025.
El presidente ha prometido que los ingresos arancelarios reducirĆ”n la deuda nacional, que actualmente asciende a 38,45 billones de dólares. Durante el verano, dijo a los legisladores que otros acuerdos que estĆ” alcanzando āalgunos a cambio de reducir los arancelesā reducirĆan los precios de algunos medicamentos en un 1500 por ciento, una proeza de gimnasia matemĆ”tica que dejó perplejos a algunos de sus oyentes.
The New York Times en EspaƱol



